Esos cabellos blancos que se mezclan con tu color natural no informan su fecha de aparición. Debido a la edad o herencia natural, las canas carecen de una hormona denominada melanina, encargada de aplicar color a tus pelos, piel e incluso los ojos.
En este artículo no buscamos enseñarte cómo ocultarlas una vez que se han instalado en tu cabeza, sino cómo evitar las canas. Y tenemos excelentes noticias, porque vamos a ofrecerte una serie de tips que no tenías idea de que existían.
Antes de mencionarlas, debes entender que la canicie no es una enfermedad y mucho menos una pérdida de belleza. Estos pelitos blancos, que además denota experiencia, aparecen entre los 30 y 40 años de edad. Hay quienes suelen verlas desde los 27 y 28, dependiendo de las condiciones hereditarias.
Cómo evitar las canas
Deja de fumar
A las graves consecuencias que produce el cigarrillo: dificultad respiratoria, cáncer, daño a las cuerdas vocales y mal aliento, ahora agrégale canas prematuras.
De acuerdo al portal Mejor con salud, estudios afirman que existe relación entre el tabaquismo y la canicie en la caída del cabello. Y es que las sustancias que contiene el cigarrillo, como la nicotina y el alquitrán, aceleran el deterioro capilar.
No te excedas de los rayos del sol
Siempre resulta una delicia broncearse, sin embargo, la constante exposición puede producir daño capilar y prematura aparición de canas. Lo más recomendable es el uso de sombreros o productos que eviten la exposición directa.
También es útil aplicar mascarillas que revitalicen tu cuero cabelludo, luego de haberte sometido a los rayos del sol.
Prueba con el aguacate
Gracias a su vitamina E, proteínas y ácidos grasos, el aguacate es un alimento especial para proteger tu cabello. Pero qué tal si no solo lo consumes, sino que también lo apliques directamente en tu zona capilar. Este truco fantástico te ayudará a evitar las canas.
No te agradará, pero... ¡cebolla cruda!
Siempre incluida en tu mercado de vegetales, la cebolla es una planta herbácea que posee una enzima llamada catalasa. Esta ayuda a proteger los folículos pilosos (parte de la piel en la cabeza que da crecimiento al cabello) y evita la decoloración capilar.
El método más sencillo es tomar la mitad de una cebolla y frotarla sobre el cuero cabelludo, dejando actuar por unos 30 minutos. Otra manera es extraer el jugo y rociarlo en las raíces de tu pelo. No olvides retirarlo con suficiente agua y lavar con shampoo un par de veces.
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