Una de las mayores "tragedias" que puede ocurrirle a una mujer, es romperse una uña. Así como el cabello y la piel, nosotras nos empeñamos en cuidarnos las uñas de las manos. Queremos verlas sanas, fuertes y pintadas para que luzcan siempre.
Y qué injusto que después que invertimos o nos regalan una sesión de manicura, un inesperado accidente te deja con la uña lesionada. Cuando son largas suelen partirse por la mitad, ya que se vuelven más sensibles, y como una tragedia no viene sola, sucede justo antes de un evento importante.
Pero acá vinimos para ayudarte, así que vamos a enseñarte cómo recuperarla con un proceso sencillo y duradero. No desesperes, que todo tiene solución.
Arreglar una uña rota
Busca los siguientes materiales
- Una lima
- Tijeras
- Esmalte transparente o brillo
- Un bastoncito de algodón
- Una bolsa de té (blanca)
Paso a paso
1. Quita el esmalte, limpia y seca bien la uña partida. Hazlo con cuidado utilizando removedor, alcohol o agua.
2. Recorta la bolsa de té dándole la misma forma de tu uña. Si te es complicado puedes calcarla primero.
3. Ahora aplica el esmalte transparente en toda la uña y seguidamente pega el trozo de papel (de la bolsa del té). Ayúdate con el bastoncito de algodón para que se adhiera. No utilices los dedos porque podrías despegarlo.
4. Si te sobra papel en los bordes de la uña, recorta con mucho cuidado. Luego aplica una capa del esmalte transparente para que quede completamente adherido.
5. Deja secar y dale forma con la lima.
¿Qué hicimos?
La idea de esta técnica es tapar y proteger la uña afectada. Imagina que estás colocándole una venda, sin embargo, el papel es tan sutil que podrás aplicar nuevamente la base y el esmalte de tu preferencia y nadie notará lo ocurrido.
Este remedio es rápido, puede sacarte de un apuro y no necesitas eliminar la inversión de belleza en tus manos.
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