La bechamel es una de las salsas mas deliciosas para comer con pasta. Se incorpora en las lasañas, en los pastichos y en muchas otras recetas en las que podrás incluir pastas o carnes, incluso muchas personas adoran la salsa bechamel con diversas recetas, pero existe un gran problema.
¿Qué pasa si no sé hacer salsa bechamel? Con eso no hay ningún inconveniente, es totalmente común no saber hacerla, pero ¿sabes qué es lo mejor? Que es rápida y sencilla de hacer, si quieres aprender cómo hacer bechamel, pues sigue leyendo.
Ingredientes
- Una cucharada y media de harina, o en su defecto, maizena
- 400 mililitros de leche
- Dos cucharadas llenas de mantequilla o margarina
- Una cebolla blanca
- Sal al gusto
- Nuez moscada
Preparación
Después de comprar los ingredientes para tu bechamel, lo que debes de hacer es lavar bien la cebolla blanca, pelarla y cortarla en juliana delgada, esto para que no se sienta en la salsa y le de ese sabor característico que solo la cebolla da. Luego de tener la cebolla preparada, tomarás una pequeña olla y la pondrás en la hornilla a fuego bajo.
En cuanto la olla ya esté caliente, verterás en ella las cucharadas de mantequilla y cuando la mantequilla empiece a derretirse vaciarás la cebolla en julianas allí, con la ayuda de una paleta mezcla suavemente, hasta que la cebolla empiece a transparentarse, ya con la cebolla completamente integrada junto con la mantequilla. Colocas la harina o la maizena y con la paleta mezclas suavemente, con paciencia para que la harina no tenga una textura muy gruesa.
Cuando la harina esté integrada con la mantequilla y la cebolla, añade parcialmente la leche mientras vas integrando todo, no dejes de remover, recuerda que si dejas de remover en algún momento la consistencia de la crema será un desastre. Cuando consigas una crema homogénea viertes el resto de la leche, sin dejar de mover cuidadosamente con la paleta la mezcla.
Con todo integrado coloca sal al gusto y la nuez moscada, después de integrarlo todo, déjalo cocinando durante aproximadamente 10 o 15 minutos, esto le dará suavidad. En cuanto unas pequeñas burbujas que te manifiesten su espesor empiecen a aparecer en la crema puedes apagar la llama.
¡Y listo! En unos pocos minutos tendrás lista tu salsa bechamel, para combinarla con cualquier platillo que desees, ¿lo ves? No era tan difícil como lo pensabas.
Foto: MaxStraeten (Morguefile.com)
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